Los casos de Selena Quintanilla, Shakira y Luis Miguel, son una clara evidencia por la cual debieron renunciar a vivir su niñez por su carrera.

Para ellos no fue nada fácil.

Cosas que cualquier niño o niña debería hacer durante su infancia, tales como: jugar en el parque con amigos, andar con amigos, jugar futbol, o saltar a la cuerda, son cosas que cualquiera que haya tenido una niñez feliz lo recordaría muy felizmente y con nostalgia.

Pero asi como hay niños que fueron felices también hay algunos que no tuvieron tiempo para esto, ni siquiera para jugar una partida de esos videojuegos que en su época eran famosos.

Se trata de tres artistas latinos, que son una leyenda y que por su prometida carrera fueron obligados a renunciar a su niñez por trabajo.

No disfrutaron de su niñez porque son artistas, que aunque hayan tocado el cielo, debieron aceptar todas esas cosas que le trajeron la fama desde muy pequeños.

Selena Quintanilla

La infancia de la reina Tex Mexico no fue para nada facil, tanto para ella como para sus hermanos. Ya que su padre tenia una estricta manera de hacer cumplir su propia voluntad. Alejo a Selena de su mayor sueño de ser diseñadora de modas.

Los ensayos, conciertos y las giras, pasaron a ser el centro de la vida de la infancia perdida de Selena. Solo Dios fue quien le dio las fuerzas para seguir y poder llegar hasta donde llego que hasta la fecha es recordada y homenajeada.

Shakira

La artista que supo crearse a si misma en su carrera y pudo lograr lo que no todos pueden; triunfar de varias formas y estilos.

Con la edad de 13 años, fue descubierta por un ejecutivo de la empresa Sony Colombia, fue cuando saco su primer álbum.

Luis Miguel

También llamado el Sol de México.
Impulsado por su padre a tan solo 10 años de edad hizo su debut en los escenarios en ciudad Juárez, desde entonces no se bajo. 

De la mano de su padre Luisito Rey, con quien tuvo un fuerte enfrentamiento, ya que Luis Miguel debía dedicar su vida y tiempo completo a la música y no a divertirse con sus amigos, jugar a la pelota o lo que todo niño haría a su edad.